La nueva entrega de la saga animada evidencia serios signos de desgaste. Esta vez, la ardilla Scratt desencadena una catástrofe cósmica a partir de la eterna búsqueda de su bellota esquiva. Sid, Manny y su familia, y los demás personajes, se organizan para evitar el colapso del planeta con un meteorito gigante que avanza hacia ellos.
Sin ideas centrales para desarrollar ese argumento, los directores se limitan a llenar minutos con gags y bajadas de línea sobre los valores familiares a repetición. El resultado es poco entretenido, aunque los más chiquitos –sub 7- pueden divertirse.