Dirigida por Adam Shankman ("Hairspray"), “Rock of Ages" (La Era del Rock) es la adaptación cinematográfica de un gran éxito musical de Broadway.
Resulta entretenido el filme, aunque el guión es por demás clásico y cargado de clichés. La película cuenta la historia de Sherrie (la cantante country Julianne Hough), una chica de pueblo, y Drew (el mexicano Diego Boneta), un chico de ciudad, quienes se conocen en el corazón de Hollywood, mientras persiguen sus sueños y se enamoran a primera vista.
Su historia de amor estilo rock ‘n’ roll está contada (o mejor, cantada) a través de los vibrantes éxitos de Bon Jovi, Guns N' Roses, David Lee Roth, Joan Jett, Extreme, Def Leppard, Foreigner, Journey, Poison, Pat Benatar, Warrant, Whitesnake, Night Ranger, Twisted Sister, Starship, Quarterflash, Quiet Riot, Skid Row, Scorpions y REO Speedwagon.
Lo mejor es la música: la elección de los clásicos rockeros de los 80s resultan un placer, con geniales arreglos musicales, incluyendo, en un par de escenas, dos canciones diferentes mezcladas y convertidas en una sola (como "We built this city" + We´re not gonna take it" y "Juke box hero" + "I love Rock ´N ´Roll").
Sobresale el rol de Tom Cruise, una acertada caricatura de los glam rockers de la época. Alec Baldwin se anima a besarse con un hombre, Malin Akerman lo hace con Cruise (lengüeteándolo por todos lados) y Catherine Zeta-Jones nos recuerda que ganó un Oscar por bailar y cantar en “Chicago”, y aquí también lo hace bien, aunque en un rol algo obvio.
También hacen su aporte Russell Brand, Paul Giamatti, Bryan Cranston y Mary J. Blige.
Cabe aclarar que todas las voces de los actores no han sido dobladas: son ellos mismos los que interpretan las canciones: todo un acierto.
Vale la pena para disfrutar las puestas cliperas de temazos ochentosos, que no es poco para un musical.