En el caso de la mediocre pero paradójicamente interesante La espía roja también hacemos hincapié en la relación entre los recuerdos y la reconstrucción del relato, aunque lo más interesante pasa por representar oblicuamente un síntoma actual del desorden político ubicuo: la restauración del delirio persecutorio propio de la imaginación conservadora sobre una nueva amenaza comunista. (Emisión radial)