Hombre lobo del hombre
"The Big Short" es una de las películas nominadas a lo mejor del año en los Oscars edición 2016. La película está dirigida por Adam McKay ("Anchorman", "Talladega Nights") y trata en clave de "dramedia" sobre la crisis inmobiliaria que tuvo Estados Unidos allá por el 2008 y que afectó la economía mundial.
McKay lo que hace es tomar un tema complejo, que cinematográficamente podría haber sido un bodrio, y lo convierte es un relato muy interesante, divertido y devastador a la vez. Nos ofrece una mirada bastante certera y crítica de los gestores de este desastre financiero, cómo la ambición de los artífices de la burbuja inmobiliaria llevó al capitalismo al borde del colapso, pero lo más devastador que ofrece es un vistazo sobre la débil condición humana del siglo XXI.
Un montón de giles despreocupados nadando en una pecera de consumismo acechada por un grupo de tiburones listos para atacar cuando sea el momento correcto. En ese contexto, cuatro tipos de firmas financieras distintas supieron predecir lo que estaba por pasar e hicieron muchísima guita cuando finalmente se produjo la crisis. Estos cuatro protagonistas son Christian Bale, Steve Carell, Ryan Gosling y Brad Pitt junto a dos novatos de la finanzas. Todos hacen un muy buen trabajo interpretativo, pero el que más se destacó fue sin dudas Bale con un personaje tan repulsivo como hipnótico, un genio incomprendido.
El ritmo del film es también algo para destacar, dinámico, con momentos explicativos a cargo de celebrities que nada tienen que ver con la trama y conversaciones con el espectador al estilo "House of cards". McKay toma una temática pesada y le pone entretenimiento sin dejar de ser filoso y muy crítico. Es casi imposible no recordar a la película de Martin Scorsese, "The wolf of Wall Street". Se muestra con crudeza como se mueve el dinero en los grandes bancos y como se hacen negocios encadenados de valores intangibles respaldados por la misma nada.
Creo que "The Big Short" o "La gran apuesta" como se la llamó en nuestro país, es un gran film que, sin ser lo mejor del año, tiene merecida su nominación al Oscar y constituye un muy buen entretenimiento que tira un poco de luz sobre este hecho importante de consecuencias mundiales que nos tocó de rebote y sobre el cual no tuvimos mucha explicación en su momento. Recomendable.