La vida (no siempre) imita al arte
Basada en la novela gráfica Gemma Bovery, La ilusión de estar contigo (Gemma Bobary, 2014), de Anne Fontaine, narra la historia de un panadero que cree ver en su nueva vecina una Emma Bovary contemporánea.
Por más que Martin (Fabrice Luchini) haya dejado su labor editorial para tener una apacible vida como panadero, la profesión de su padre, hay algo que aún lo incomoda. Es el tedio de la vida cotidiana, aquel que Flaubert plasmó en su obra maestra Madame Bovary. Y lo hizo tan magistralmente, que hoy en día se habla de “bovarismo” para dar cuenta de esa insatisfacción con lo mundano y la urgente necesidad de vivir en la fantasía. Cuando en el barrio de Martin se instalan Gemma Bovery y su marido Charles (ambos ingleses), la conexión es inevitable: ¿hay, en ese matrimonio, y más específicamente en esa mujer, algo de la novela que marcó un hito en el realismo del siglo XIX?
Anne Fontaine (dedicada a filmar historias de inconformismo que hoy en día escandalizan poco y nada; tal es el caso de la reciente Madres perfectas, 2012) construye un film “ameno”, bastante obvio, que indaga en los tópicos esenciales de la novela sobre la que vuelve una y otra vez, sobre todo a partir de las analogías que encuentra Martin. Pocas veces se hizo un uso tan pobre de la voz en off, tanto que por momentos genera fastidio la escasa confianza que pone el guión en la propia interpretación del espectador.
Gemma se convierte en la obsesión de Martin, más aún cuando comienza a tener una relación clandestina con un bello joven que también vive cerca. Así, las conexiones se harán cada vez más obvias (como la película), y ese “bovarismo” al que aludíamos será más que de ella, del panadero voyeur. La ilusión de estar contigo se pretende una comedia pero no genera mucha gracia, aspira a la profundidad de tópicos transitados por la literatura pero sólo consigue parodiarlos, apela al erotismo pero termina siendo pudorosa…
Estimado cinéfilo, por una vez desde estas páginas le recomendamos que lea una novela. Es Madame Bovary y supera holgadamente al visionado de este film.