Un hombre razonable, demasiado enamorado de su muy bella esposa, descubre que ella tiene una relación paralela, lo que lo lleva a la tragedia. El film decide tomar como norte el drama interior de los personajes y la retórica de la culpa, lo que vuelca casi todo el peso de la puesta en escena en el trabajo de los actores. Y si bien es perfecto, eclipsa esa dimensión extra que el cine provee a lo que, de otro modo, sería correcto teatro. De todos modos, apreciable.