Miembros del colectivo ContraImagen y colaboradores de La Izquierda Diario (un muy buen portal digital de orientación trotskista), Violeta Bruck y Javier Gabino codirigieron este documental (con algunos pocos momentos de ficcionalizaciones que no agregan demasiado) con cuatro historias de vida, cuatro experiencias revolucionarias (incipientes, pioneras) en la Argentina: Mateo Fossa, Pedro Milesi, Mika Etchebéhère y Liborio Justo; es decir, dos jóvenes obreros, una estudiante de clase media y el hijo del dictador Agustín P. Justo de origen aristocrático.
La película va trazando relaciones, asociaciones, analogías (a veces un poco caprichosas) entre aquellos hechos del pasado (todos inspirados al calor de la revolución bolchevique de 1917 en Rusia) y el presente de una Argentina sacudida por la profunda crisis económica y la marea verde del movimiento feminista. Pero, claro, son cuestiones entre ensayísticas e ideológicas que habría que discutir en otro ámbito y otro contexto.
Lo mejor del film es su trabajo de investigación, su uso del material de archivo, sus entrevistas con historiadores y analistas (la propia Bruck aparece en varios momentos en pantalla dialogando con quienes ofrecen sus testimonios) y, en ese sentido, la historia más fascinante es la de Liborio Justo a.k.a. Quebracho (1902-2003), quien no solo se despegó de los mandatos familiares sino que se dedicó a viajar por el mundo (con hermosos registros literarios y fotográficos), abrazando en cada destino distintas reivindicaciones revolucionarias que -más allá de las peleas y disputas internas propias de la izquierda- lo convirtieron en referente de varias generaciones de militantes hasta pasados los 100 años de edad.
Las luchas estudiantiles y obreras, las grandes huelgas proletarias, la reforma universitaria, la Semana Trágica, la Guerra Civil Española y la inevitable reivindicacion de León Trotsky en las internas de la izquerda son los principales hitos que conforman el trasfondo en el que luego se desarrollan las cuatro interesantes historias de vida que merecían una reconstrucción y, sobre todo, esta reivindicación.