¿Seven days? … ¿no puede ser ya?
Tras la desaparición del cliché y unidimensional universitario Holt (Alex Roe), su cliché y unidimensional novia Julia (Matilda Lutz) tomará las riendas del asunto e irá a buscarlo desesperadamente. En la universidad, la joven cruzara camino con un grupo de estudiantes, liderados por el profesor Gabriel (Johnny Galecki), dedicados a investigar el ahora legendario video asesino, conocido por maldecir a quien lo ve, sentenciándolo a morir terrorificamente siete días después. Todo desembocará en un oscuro viaje para detener al espíritu de Samara, responsable de éstas malignas muertes.
Antes de hablar de ésta continuación, recapitulemos un poco ésta saga que remakea a la hollywood la japonesa ‘Ringu’. La primera entrega, titulada “The Ring” y protagonizada por Naomi Watts y dirigida por Gore Verbinski, fue estrenada en 2002 y logró adaptar de una forma bastante copada la película nipona. Además de ser un éxito en taquilla, la película cayo muy bien tanto a la audiencia como a la crítica especializada y dejo marcada a una generación con sus escalofriantes momentos. Esta remake cosechó tanto positivismo que Hideo Nakata, director de la original, acepto dirigir la secuela “The Ring Two” (2005) al tener que dejar atrás a Verbinski por cuestiones de agenda con Disney y sus fructíferos ‘Piratas Del Caribe’. Si bien la continuación cayo en el olvido por ser bastante floja y menos perturbadora que la primera parte, en ella Naomi Watts volvió a sorprender en su perturbado personaje … personaje que de verdad se extraño en ésta mediocre tercera película dirigida por el español F. Javier Gutiérrez.
Como sabrán, queridos lectores, siempre me gusta señalar lo bueno al principio y deleitaros con lo malo al final. Pero ésta vez voy a traicionar mi regla para desahogarme con los horrendos, aburridos, fotocopiados, detestables y poco inteligentes personajes principales, Julia y Holtz. Mi problema radica en que es probable que el guionista haya buscado hacer un BINGO de cosas que absolutamente toda película de terror mediocre tiene en su haber. Los personajes son melosos y aburridos, no hay nada interesante que me haga sentir un gramo de interés en lo que les pasa. A eso iba mas arriba cuando decía que extrañaba a Naomi Watts, ya que su personaje no solo estaba bien interpretado, si no que el guión mostraba una dinámica muy tosca e incomoda con su hijo Aidan.
En esta ocasión, el guión claramente dejo de lado la complejidad para brindarnos poco de lo cual acordarnos. Como punto positivo me gusto ver a Galecki en algo que no sea “The Big Bang Theory”, siempre me pareció que el actor podía lograr bastante versatilidad en sus papeles y de a poco el tiempo me va dando la razón. Además su personaje es uno de los centrales en un fugaz momento de lucidez del film en el cual nos brindaron algo interesante, pero voy a hablarles de eso mas tarde. El reparto ofrece otro gran aporte que es al maestro Vincent D’Onofrio, el gran Wilson Fisk de ‘Marvel’s Daredevil’, quien interpreta a un campesino ciego (oh, la ironía) clave para la trama principal.
Con respecto a la historia, por momentos se puede apreciar que había buenos conceptos planeados para el film, los cuales quedan en la nada misma para ofrecernos una innecesaria nueva historia que ofrece un origen del origen de la malvada entidad conocida como Samara Morgan. Uno de estos, es la organización secreta de estudiantes quienes se dedican a analizar el video maldito de la perversa entidad, la cual esta compuesta por sobrevivientes que se iban pasando la maldición unos a otros para llevar a cabo un estudio sobre la vida después de la muerte. Otro fue que le dieron pie a la tecnología actual, el vídeo se reproduce en celulares o computadoras, lo cual pudo haber sido bastante terrorífico si no hubiesen desaprovechado la idea. Es más, me atrevo a decir que ya con esos dos conceptos desaprovechados podía hacerse una tercera película muy interesante que apunte a un lado mucho más existencial y escalofriante, pero se ve que el terror juvenil vende mucho más.
Respecto a la parte escalofriante del proyecto, lamento decepcionarlos diciéndoles que es bastante mediocre. Las escenas de terror son copias de la primera entrega, lo cual malhumora por una cuestión de que con el surgimiento de lo viral podría haberse hecho una historia mucho mas terrorífica para el mundo contemporáneo. La historia intenta ser sería, quita el terror con el afán de ser psicológica y detectivesca como la primera entrega pero se queda en lo aburrido y superficial del peor cine de terror que Hollywood puede ofrecer. Un acierto fue devolverle la paleta de color verdosa y saturada de la primera película, le da un ambiente oscuro y denso al apartado visual del film.
¿Hago mal en quejarme tanto de “La Llamada 3”? Objetivamente no. ¿Por qué tan absoluta mí respuesta? Bueno, al estar basada en una saga de terror japonesa muy buena y tras haber obtenido una gran remake (oh, milagro!), uno busca que la calidad de este tercer proyecto este a la altura de las circunstancias. Si quieren saber de que va este nuevo capítulo, les aconsejo que no gasten en una entrada y esperen a verla en casa. Lo que si nos demostró este nuevo film, es que los espíritus malignos con gran elongación se niegan a pasar de moda.