La vida a través de un celular
Interesante película sobre una mujer y su lucha diaria para sobrellevar las cargas de la vida, pero que falla estrepitosamente a la hora de crear un fuerte relato creíble donde a fuerza de personajes estereotipados y situaciones comunes se intenta forjar una trama de apariencia naturalista. Una trama simple que aburre por su continua inocencia a la hora de presentar los problemas reales que aquejan a este mundo.
Si bien "La llamada" tiene intenciones nobles al preocuparse por brindar un mensaje positivo sobre la alienación humana producida, en este caso, por el exceso trabajo, carece de todo tipo de originalidad o naturalidad. Nada en este relato es genuino. Todo parece más un cuento moralizante para chicos pequeños, que un acercamiento hábil o profundo sobre las dificultades de una familia quebrada por el divorcio de los padres, en donde la madre no puede contra las presiones y su hijo ha perdido interés alguno por su futuro.
La historia pudo haber tenido un desarrollo interesante, pero el problema fue que nunca logra centrarse en algún tema en particular. Por ejemplo, durante toda la trama se contrastan la agitada experiencia de la madre llena compromisos y preocupaciones con la estadía silenciosa y desinteresada del hijo solo en la sala de castigo. Era un muy buen punto de partida, sin embargo el ritmo interno de las secuencias es idéntico entre sí, lo cual no las separa ni diferencia. De esta manera, esta diferencia se vuelve nula rápidamente evitando que la película se eleve dramáticamente.
Por otra lado, la trama en si misma esta siempre al borde de caer en un ridículo extremo. Los distintos acontecimientos a los que se enfrentan la madre se vuelven cada vez más risibles e insoportables. Desde la socia de trabajo hasta el taller mecánico, todos son inconvenientes en donde ella parece lidiar con infantes que con adultos responsables. Incluso, los distintos personajes que rodean al hijo en la escuela, también son más caricaturas que personas reales.
"La llamada" es una película que no sabe exactamente como pretende llevar adelante su relato, ya que con el objetivo de mantener el interés del espectador, continuamente mantiene recargado el relato con sorpresas y giros para la madre. No obstante, en ningún momento, logra darse cuenta que entre más piedras pone en su camino, más absurda e irrelevante se vuelve la historia.