Las ganas de ser madre y los miedos que acompañan todo embarazo se confrontan en este documental con diversas posturas feministas, la reticencia a seguir “el mandato patriarcal” (o el simple mandato de la especie), el encuentro con la propia historia familiar de la directora y la reunión de jóvenes madres contándose sus experiencias, una de ellas acompañada por su esposo emocionado.
Marina Zeising (“Habitares”, “Lantec chaná”, encuentro con el último hablante de la lengua indígena chaná, etc.) expone todo esto en primera persona, exponiéndose ella misma, y agregando también otros elementos para la reflexión, como las notas “de color” de los viejos noticieros, el recuerdo de unos amores frustrados, o del encuentro con el niño esperado para la adopción, las manifestaciones abortistas frente al Congreso, las diversas opciones de parto que hoy ofrece una clínica, también un testimonio del maltrato que algunas parteras les dedican sádicamente a las parturientas en los hospitales públicos, ignorando el proclamado concepto de sororidad, y otras cosas.
La búsqueda de información la lleva a Roma, Oslo, el Gran Buenos Aires y el pueblito noruego de sus ancestros. Quizá sea demasiada información y demasiado variada, pero más vale así para abrir el juego. Como corresponde, gustará especialmente al público femenino.