Las historias de terror con casas donde suceden cosas raras suelen ser un recurso muy usado en el terror y el suspenso. Aquí una joven pareja se instala en un hogar crujiente, la casa familiar de la joven madre. Lo cierto es que el marido, que esta mucho tiempo afuera, no le cree a su esposa, que esta al cuidado del pequeño hijo, que en ese lugar lo sobrenatural se está aflorando. Hay una maldición que en realidad pende sobre la familia, por un abuelo que asesina a una novia embarazada, cuyo espíritu promete y cumple con una maldición por toda la eternidad. Una presencia que roba bebes. La solución será, con ayuda mediante, darse un paseíto por el inframundo buscando a la criatura. Un argumento que no es nuevo, pero que es llevado discretamente por el director Francesco Picone, con golpes de efectos, apariciones, ruidos y sustos varios. Para los amantes del género un entretenimiento módico.