Jorge (el Puma Goity) tiene una muerte algo repentina y luego de un mes y medio, su mujer: Alicia (Lola Berthet), junta a los amigos que más lo quisieron para leerles una carta que Jorge dejó antes de fallecer. Los invitados no tienen idea de lo que preparan Alicia y Hugo (Luis Ziembrowski) para ellos, con el fin de revivir al difunto.
Nos encontramos frente a una película nacional jugada, desde el vamos. Supongo sabrás que al cine son contadas las películas nacionales que llegan, las trabas impuestas desde arriba son varias y dentro de lo que se puede ver, predomina el drama, polulan usualmente los mismos actores gancheros (el clásico ejemplo: Ricardo Darín), etc. Conseguir meter una película de terror con toques de humor negro y chispazos de gore en cartelera, no es joda. La Memoria del Muerto entra en la camada de Cine de Género Argento, que tan bien nos hace.
La película tiene dirección de Valentín Javier Diment, responsable de
El Sentido del Miedo (2007) y Parapolicial Negro: Apuntes para una prehistoria de la Triple A (2010), y guión de Martín Blousson (quien también trabajó en las mencionadas) quienes nos llevan por un constante salto de disco sorpresivo y mantienen pendientes hasta el final.
Se puede ver cine de género; enredos sangrientos, melodrama pasional y escenas impactantes jodidas, fuertes.
Los seguidores de la mejores épocas de Sam Raimi y Darío Argento la van a disfrutar el doble. Tiene ese rico aire a cine de terror italiano.
Encerrar a los protagonistas para que sufran es un clásico truco que hemos visto muchas veces, pero esta vez se enfrentan a sus propios miedos y verdades. Hay un manejo de climas muy interesante, sobredosis de opresión logrando transmitirla y contagiarla al espectador.
El ambiente va creando una atmósfera tensa, donde nos desorientamos e intrigamos hasta llegar a la media hora final donde explota la resolución de manera impensada. Un magnífico desenlace que no tiene nada que envidiarle al cine de afuera.
A destacar: La música de Pablo Borghi es certera y te empapa de suspenso, los efectos especiales están
muy bien logrados y abunda lo clásico: el látex, las réplicas, tiene pc/cgi pero no recae todo el tiempo en eso, algo que es un plus altísimo.
Lola Berthet se muestra como una actriz versátil y la descose, pasa por todas las facetas, dá cátedra.
Querían películas nacionales distintas en los cines? esta es su oportunidad para ir a ver algo jugado, de género y con sintonía fina. Aprovechen este fin de semana largo y vayan a ver La Memoria del Muerto, que no se van a arrepentir.