Basada en sucesos reales, A L’Origine relata la historia de un estafador que buscando nuevas presas logra por casualidad internarse en un plan de construcción de una autopista, haciendose pasar inadvertidamente como el representante de una empresa de construcción multinacional.
Un pueblo rural marginado de negocios anteriormente, no quiere volver a perder la oportunidad, por lo tanto ponen todo su empeño, trabajo y personal, aprontando tal magnifica construccion, un tramo de autopista que no va hacia ningun lado. El frade continúa inexplicablemente sin siquiera el asomo de la más mínima sospecha, Phillippe Muller (Francois Cluzet), asi apodado, revoluciona la región rural brindando esperanza de una forma de vida mejor, dignificando a la persona gracias al trabajo y siendo aceptado por la misma, algo que no habría lograda jamás en su desapercibida vida anterior.
La interiorización de Muller es fenomenal, su involucración en una obra que se la va de las manos, una simple estafa que termina tomando un volumen inimaginable.
Cluzet interpreta a Muller, anteriormente visto en el protagónico del destacable thriller Ne Le Dis a Personne (Tell No One) cumple con un rol vertiginoso, de esos denominados “más grandes que la vida misma”.
Xavier Giannoli, presente en la sala, comentó acerca de la diferencia de duración del film, en su exhibición para esta Semana De Cine Europeo en comparación con la versión presentada en Cannes. Se indagó sobre su relación con el Muller autentico y las conversaciones que tuvieron estando este ultimo internado en una carcel, cumpliendo condena.