Los chilenos tienen, hoy y por lejos, el mejor cine de América del Sur. La Nana, film multipremiado, es un ejemplo: la historia de una sirvienta que no quiere quedarse sin trabajo opta por varios tonos, desde la comedia hasta el suspenso y acierta en todos, dejando como telón de fondo los conflictos sociales y enviando al primer plano al personaje, tan atractivo como peligroso. No se la pierda.