Es perfectamente entendible que La niña del sur salvaje haya funcionado muy bien en Sundance y Cannes, pero que haya recibido tal atención de la Academia como para ser nominada a mejor película y mejor director es inexplicable. Más si se tiene en cuenta que quedaron afuera films y directores tales como El vuelo (de Robert Zemeckis) y Ben Affleck (por Argo, que sí está nominada).
Esta observación no quiere decir que el estreno en cuestión es una mala película, porque no lo es. Sino que está totalmente sobrevalorada.
Vale aclarar que el director Benh Zeitlin hizo un gran trabajo en su ópera prima si se tiene en cuenta los pocos recursos a los que pudo aspirar en esta producción independiente. Incluso logró que los elementos fantásticos que presenta la trama sean bastante creíbles (sería injusto comparar con una película con un presupuesto multimillonario).
El realizador crea un mundo sucio y violento en donde los protagonistas viven por voluntad propia en una marginalidad extrema pero si se analiza un poco más surge la pregunta: ¿Tenían opción?.
El gran atractivo del film es la interpretación de Quvenzhané Wallis, quien con tan solo nueve años se transformó en la actriz más joven en obtener una nominación al Oscar.
Su trabajo es excepcional y es imposible no sufrir con ella y que al espectador no le den ganas de rescatarla de ese mundo, incluso luego de comprender de que ese es su lugar.
Las charlas que tiene con su madre (muerta o desaparecida), las ganas de encontrarla y la problemática relación con su padre alcohólico (otra magnífica interpretación por parte de Dwight Henry) logran estremecer.
Sin embargo, pese a la calidad actoral y la buena producción y dirección, el film falla en lo narrativo y por momentos aburre bastante.
No es una película para las masas y da la sensación de que se pretendía mucho a nivel guión (otra nominación no merecida) pero se queda en el camino.
Dentro de todas las opciones que hay en cartelera, y entre ellas todas las nominadas, La niña del sur salvaje no justifica la entrada del cine al igual que no justifica sus nominaciones (salvo por la actriz).
Está ahí porque la Academia tenía que meter una película independiente.