Es muy fácil caer en lo obvio y pegarle un poco a La noche más oscura por el lado de que es una película a favor de la propaganda estadounidense y pro tortura, o incluso al revés, que está en contra de la tortura y que es un film totalmente alineado con la Administración del Presidente Obama y que denosta a la de Bush, y tal vez estaría bien criticarla por ese lado. Pero aquí nos abocaremos a analizar el trabajo de Kathryn Bigelow sobre lo que fue la inteligencia, captura y ejecución de Osama Bin Laden a lo largo de casi 10 años. Más allá de que eso haya sido verdad o no…
La directora ganadora del Oscar logra mantener un clima de tensión absoluta en una historia de la cual ya se sabe el final, y eso es algo para destacar y remarcar.
El aspecto técnico es formidable en todo sentido pero en particular la mezcla de sonido así como también el realismo aportado a los usos militares y estrategias de combate.
El film claramente político por lo ineludible de su coyuntura pasa a ser lo que realmente es: una película bélica y como tal funciona pero hasta ahí nomás.
Si la comparamos con alguno de los grandes exponentes recientes del género, tales como La caída del Halcón Negro (2001), sale perdiendo. Sin embargo, la comparación no se hace debido a lo contemporáneo de su historia y el mix de géneros que logra Bigelow y eso también es formidable.
Recursos de un thriller e incluso de película documental logran entretener y no aburrir por las más de dos horas y media que dura el film, donde los diálogos no son pesados. Tampoco hay grandes monólogos para destacar por parte de un elenco que no brilla.
Y si hablamos del elenco, este es un buen momento para desinflar el mito que la prensa norteamericana ha generado alrededor de Jessica Chastain y el personaje que compone, Maya, quien parecería, según se lee o escucha, que es una suerte de nuevo superhéroe.
La realidad es que la actriz está muy bien en su papel pero tampoco hacía falta grandes dotes actorales para lograrlo. Cualquiera de las intérpretes profesionales de Hollywood que transitan los diferentes estudios podía lograr sin dificultad lo que aquí hizo Chastain.
En conclusión, La noche más Oscura es una buena película bélica totalmente oportunista cuya finalidad es más bien alborotar un poco Washington DC en lugar de dejar su marca en el cine.
¿Buena? Si, ¿Merecedora de tantas nominaciones?, No.