Un viaje interior a las tradiciones: "La Pequeña Jerusalem"
Por esas cosas azarosas que tiene la distribución en Argentina, este primer film de Albou llega a nuestro país posteriormente a "La canción de las novias" que es su segundo film y ya fue estrenado unos meses atrás.
Un barrio de los suburbios de Paris, Sarcalles, habitado en su mayoría por judíos, llamado justamente por eso "La Pequeña Jerusalem" es el marco donde la directora Karin Albou nos cuenta la historia de dos hermanas de una tradicional familia inmigrante.
Una de ellas, Matilde (Elsa Zylberstein) está casada con un ortodoxo y son fieles seguidores de la religión mientras que Laura (Fanny Valette) es estudiante de filosofía, también estudia y se interesa por su religión -aunque de un modo más cuestionador-.
Trabaja por la noche en una escuela, donde conocerá a Djamel -su compañero de trabajo que vive ilegalmente en Francia- y con el que se despertará una pasión "prohibida".
Mientras que su hermana se encuentra aferrada a la religión y su madre viuda se conecta más con el mundo de las supersticiones (con tradiciones más arraigadas con sus origenes africanos -son imnigrantes tunecinos-), Laura trata de encontrar un camino propio tendiente a una libertad que permita despojarse completamente de estas dos fuertes tendencias.
Es por eso que en sus clases de filosofía, y siendo admiradora de la obra de Kant, tratará de buscar su propia ley a la que seguir, mientras que esa atracción que siente por Djamel la hace replantearse la necesidad o no de la existencia de reglas.
Dos hermanas representando dos mundos casi antagónicos, mundos que se distancian, que se diferencian, que se repelen casi con la misma fuerza que buscan atraerse, permiten que el guión de Albou pueda penetrar en la cotidianeidad de ellos mostrando esas diferencias, esas distancias cohabitando bajo un mismo techo.
Para esto, cuenta con la invalorable "ayuda" de dos actrices notables: Fanny Valette como Laura tiene un rostro particularmente expresivo y una belleza singular, pero sobre todo Elsa Zlyberstein como Matilde (a quien vimos recientemente en "Hace mucho tiempo que te quiero" como hermana de Kristin Scott Thomas) toma en sus manos el papel de la hermana aferrada a la religión, endurecida por los preceptos religiosos, que quiere recuperar el amor y la pasión por su marido y gozar libremente de su sexualidad; y logra los mejores momentos del film. Un trabajo excelente.
Quizás pueda parecer algo serena y demorada en detallar excesivamente algunos rituales religiosos y tradiciones familiares, pero en general la trama discurre en forma interesante, describiendo a esta familia dentro de la Pequeña Jerusalem e introduciéndonos en su mundo, sus construmbres, sus ideas, a veces tan cercanas y a veces tan distantes a las nuestras.