En octubre del 2019 un grupo de mujeres indígenas autoconvocadas de territorios en conflicto ocuparon pacíficamente el Ministerio del Interior argentino durante 11 días, reclamando el cese del Terricidio en sus comunidades. Allí se enfrentaron a la desidia del Estado y a la indiferencia de parte la sociedad, pero lograron revindicar la necesidad de recuperar un modo de habitar donde la reciprocidad y la solidaridad entre los pueblos y la naturaleza es una necesidad urgente.