La separación

Crítica de Alejandra Portela - Leedor.com

Un corte en la proyección de su primera pasada en Pinamar hizo que la función de Una separación tuviera que ser proyectada en una función al mediodía del lunes. Afuera de la sala, los empleados municipales de la ciudad reclamaban por derechos laborales.

Una separación, o "la" searación que involucra a un joven empleado, Nadir, y su esposa Zimin, una profesora, es una película fascinante. No por espectacular, ni siquiera por la importancia de su historia, sino más bien por el modo en que despliega todo su aparato narrativo, de lo más complicado de cerrar en un film.

La primer escena de esta película iraní que acaba de ganar el Oscar a la mejor película extranjera y que viene con premios como el Globo de Oro 2011, o Mejor película y mejor actor y actriz en el Festival de Berlín), marca el tono temático: una pareja enfrenta a un juez ante la solicitud de divorcio de la mujer. La causa: él no quiere ya acompañarla al extranjero. La causa de la negativa: un padre con alzheimer que hay que cuidar. La consecuencia: un descalabro general a partir del abandono de la casa de Simin.

La cámara nerviosa de Asghar Farhadi explora los espacios registrando esa ruptura, los personajes van cobrando importancia casi naturalmente, salidos de la necesidad que impulsa la vida cotidiana: la señora que cuida al abuelo, la tutora de la niña Termeh, el marido de la mujer que termina acusando a su patrón de la muerte de su bebé.

No es una película de exteriores o de tradiciones ancestrales tal como podemos recordar al cine iraní sino una pelicula urbana, con el vértigo del mundo social y cotidiano de una clase medianamente pudiente.

Es tan natural el paso de un conflicto a otro que la película transcurre soldando los recursos hasta dejar transcurrir sus 122 minutos, haciendo que esos personajes tímidos del principio aparezcan sólidos, cerrados, con sus propias motivaciones morales y éticas: desde la religiosidad de Hodjat hasta la justificación de la mentira de Nader. Cuando se piensa que es una película sobre el flagelo del Alzheimer, se transforma en una película de tribunal, de ahi a una película de principios religiosos, de ahi a una pelicula sobre el amor roto, para terminar siendo una película sobre la verdad, la mentira y la manipulación en las decisiones.

Gran propuesta Una separación que ya tiene fecha de estreno en Buenos Aires para fines de abril de este año.

Publicado en Leedor el 6-03-2012