Cada nueva traslación al cine del cuento del danes Hans Christian Andersen, publicado en 1837, se aleja mas del original. En esta ocasión toman como punto de partida el filme animado de la misma productora de 1989. Por lo cual, si ya el origen estaba tergiversando el cuento, esta lo profundiza. No es que sea una cuestión de vital importancia, pero los nuevos parámetros están mas cercanos al discurso político actual y en términos de verosímil, este queda destruido. Las acciones transcurren en el siglo XIX, principios, en algún lugar del Caribe, estancia veraniega de algún reino, se supone del norte, correcto. Ahora bien,