Con una trama tan llena de clichés como de ternura, esta película es un sí para cualquier amante de los animales.
Hay fórmulas que se repiten en muchos géneros distintos, para espectadores de todo tipo. Desde la serie de TV Starsky & Hutch (1975) hasta las películas de Hombres de Negro (1997), la dupla principal de amigos/enemigos forzados a trabajar juntos acompaña a todos hace generaciones. Se llama buddy flick y es una receta súper dinámica, maleable y que sigue funcionando a pesar de haber sido gastada hasta el hartazgo. Es, si se lo examina con una lupa más snob, una de las ideas más simples e infantiles que el cine utiliza: ya es aburrido hablar sólo de la amistad. Muchas culturas la han aprovechado, y es esa moldeabilidad la que la llevó a ser uno de los temas más fuertes del cine para niños. Si lo hicieron funcionar con un vaquero y un astronauta, con el mejor amigo del hombre la trama está casi regalada.
Max (Andrés López) es un Jack Russell Terrier que adora a su dueña. Al igual que cualquier perro, la extraña cuando se va, festeja cuando llega y aprecia cada momento que puede pasar en su compañía, pero cuando ella rescata a un Newfoundland llamado Duke (Martín Campilongo), su vida cambia por completo. La convivencia se hace imposible, y la dureza con la que compiten por un lugar en la casa es feroz. Durante un paseo, una pelea los lleva a alejarse del canil y perderse. Cuando sus mascotas vecinas se dan cuenta, se aventuran a las calles de Nueva York para encontrarlos.
El diseño de personajes que el director Chris Renaud incluye en sus películas es siempre exageradamente caricaturesco y ya, después de cuatro colaboraciones con Illumination (Despicable Me -2010-, The Lorax -2012-, Despicable Me 2 -2013-) comienza a definir el estilo de la empresa. Sus antecedentes como ilustrador y dibujante de comics le permiten participar en lo visual y creativo más que a otros directores sin esa experiencia. La ciudad de Nueva York está ya quemada en las retinas del público, sin embargo The Secret Life of Pets logró mostrarla más colorida y alegre que nunca. El trabajo de voces en español latino es excelente: una de las cosas que en el cine de animación está mucho más cuidada que en el live-action. La voz de Max fue prestada por Andrés López, un comediante colombiano que comenzó su carrera con el stand-up. Lo acompaña el argentino Martín ‘Campi’ Campilongo, también comediante pero de televisión. En la versión original los interpretan Louis C.K. y Eric Stonestreet.
Muchos han comparado la trama de esta película con la de Toy Story (1995), pero aunque haya similitudes entre ambas, cada una tiene sus particularidades. Al igual que con la serie Wilfred (2011), es fácil atraer a la gente con chistes de perros o en este caso, de mascotas en general, pero no es ese el pilar que sostiene a La Vida Secreta de Tus Mascotas. Si estuviera protagonizada por humanos no sería menos divertida, ya que las personalidades de los personajes están bien definidas y generan situaciones graciosas independientemente de la cantidad de patas que tengan.