En "La vida secreta de las mascotas", los creadores de “Mi villano favorito" indagan en el secreto mundo de perros y gatos cuando no están a la vista de sus dueños Hilarante y simple, es el filme perfecto para las vacaciones de invierno.
Un perro que no se mueve de la puerta hasta que llega su dueño o un gato que duerme todo el día. Víctimas de la viralización de videos, la gran pregunta de los que tienen mascotas de qué hacen sus animales cuando nadie los ve, fueron en algunas ocasiones contestadas pero como nos gusta desde niños soñar que hay algo más en las cabezas de estas especies domesticadas, es casi un placer culposo descubrir una película que cual “Toy Story”, imagine las historias que las mascotas ocultan.
Todo comienza en Max, perro que adora por sobre todas las cosas a su dueña Katie. Su vida marcha perfectamente hasta que Katie decide llevar al callejero gigante Duke (en la versión doblada con voz de “Campi”) a vivir con ella para que sea compañero de Max. Por sus problemas de convivencia, ambos se harán la vida imposible pero intentando deshacerse del otro, terminarán encerrados en camino a la perrera.
Cuando un grupo comando rescata a un bulldog enjaulado, en la desesperación por escapar el dúo dice que fueron abandonados y que mataron a sus dueños, para ser rescatados por el líder del grupo Snowball, y sus secuaces. Mientras tanto, los amigos de Max, varios gatos, perros y un pajarito, irán a rescatarlo, topándose con varios problemas en el camino.
Una simple historia de enredos que disfrutarán tanto chicos como grandes, principalmente basado en los lugares comunes de la relación entre amos y mascotas. Con dos de cal y una de arena, la productora “Illumination Entertainment” creó las dos partes de “Mi villano favorito”, pero en su contra también realizaron “Minions”, con mucha especulación y poca fortuna, como para tener en cuenta sobre la estructura y comedia de situación con la que nos encontraremos. Hilarante y simple, es el filme perfecto para las vacaciones de invierno.