“La Vuelta al Campo” de Juan Pablo Lepore. Crítica
En un contexto neoliberal en la era macrista marcado por la pobreza y la exclusión, la redistribución de tierras junto con la producción de alimentos forman parte de la vuelta al campo. Los campesinos que fueron desalojados por el avance de la frontera agropecuaria vuelven a la ruralidad construyendo una alternativa frente a tanta desigualdad
El documental muestra la lucha de organizaciones sociales rurales que trabajan la tierra, pequeños productores que luchan porque se le reconozca como propietarios de tierras que no eran trabajadas. También registra experiencias con el Movimiento sin Tierra de Brasil, con los trabajadores rurales en Mendoza y con la Unión de Trabajadores de la Tierra, la cual viene marcando una agenda a partir de las acciones que llevan adelante como los verdurazos. Una lucha de trabajadores rurales que ha tomado relevancia en el marco de la crisis provocada por el gobierno de Macri
El film es importante para mostrar mostrar la lucha por la tierra y la reforma agraria, herramientas históricas de luchas de clases y la que genera la posibilidad de pensar que puede existir un futuro distintos para poder ganarle a agronegocio que han traído tantos problemas a las poblaciones de Latinoamérica.
En momentos álgidos, donde se debate las retenciones a las exportaciones agrarias y el hambre ha vuelto pegar duro en la Argentina, el documental “La Vuelta al Campo” resulta una luz de esperanza en la lucha por lograr la soberanía alimenticia. Una muestra de las disputas territoriales y de la necesidad de repensar que modelo alimenticio queremos promover, el industrial o el mercado de la agroindustria familiar, que venden productos sanos y creados a partir de trabajo digno.
Puntaje: 90