El primero de septiembre llega a los cines el documental «Lady Di» (originalmente titulado «The Princess»). Un largometraje de 104 minutos que relata la trágica vida de la princesa Diana, desde su incorporación a la familia real hasta su muerte en 1997. Con una metódica labor de montaje y recopilación de información, la cinta funciona como el punto cúlmine después de tantos años de investigaciones, audiovisuales y artículos al respecto. Su debut en la gran pantalla coincide con el aniversario número 25 del fallecimiento de la princesa.
El encargado de dirigir tamaño trabajo audiovisual fue Ed Perkins. El cineasta estadounidense cuenta con una vasta experiencia como documentalista. Su carrera completa está dedicada a este tipo de cine: suma más de 16 nominaciones en premiaciones, incluida una al Oscar en la categoría «mejor corto documental». Entre sus trabajos más destacados se encuentran «Bare Knuckle Fight Club» (2007), «Garnet’s Gold» (2014), «Black Sheep» (2018) y «Tell Me Who I Am» (2019).
El factor primordial que convierte al documental en un trabajo destacable, que merece ser visto, es su particular elección argumental. Desarrolla todo su hilo narrativo con base en fragmentos audiovisuales de noticieros, programas televisivos, videotapes caseros y demás contenidos fílmicos contemporáneos. Evita el uso de recursos típicos como la voz en off de un narrador, entrevistas a referentes en el tema o la recreación ficticia de situaciones. En consecuencia, entre las únicas armas que se utilizaron para narrar la historia se pueden mencionar: una exhaustiva investigación y recopilación de material multiplataforma, un montaje certero que sabe cuándo ralentizar o acelerar el relato para mantener inmerso al espectador y un excelente diseño sonoro que no duda a la hora de enfatizar situaciones con un correcto manejo de los silencios.
Sin emitir palabra alguna, el realizador logra dejar bien en claro cuál es su posición dentro de la historia. El enfoque del largometraje está dedicado a demostrar cómo Diana Frances Spencer fue perseguida, atacada y humillada por la familia real constantemente. A su vez, enfatizan en su relación con los medios de comunicación y su nivel de exposición mediática. En algún momento del filme, se dice a claras voces que Lady Di le daba un exceso de publicidad a la monarquía, la cual no beneficiaba en nada a los anticuados estándares de repercusión que tenía la corona inglesa. Por último, se destaca el amor del pueblo hacia su princesa. No está de más recordar que fue la cara más humanitaria, activista y filántropa de la realeza, prácticamente en toda su historia.
«Lady Di» es la ocasión perfecta para inmiscuirse en el tema de agenda del mes. Quienes no conozcan nada de la historia real, van a disfrutar de un relato atrapante. A su vez, quienes ya estén al tanto de lo sucedido, podrán disfrutar de una forma diferente de abordar un documental y, tal vez, llevarse nuevos datos que amplíen su visión de los hechos. Recomendamos aprovechar el breve estreno en pantalla grande.