De Silvio Soldini, el autor de la deliciosa "Pan y tulipanes" y de la inquietante "Cosa voglio di più" (dos miradas sobre las ventajas y desventajas del adulterio), llega ahora un relato agridulce, cuyo título de venta entre nosotros anuncia el amor de una persona con otra. El título original es distinto, "Il colore nascosto delle cose", el color escondido de las cosas. Es decir, hay algo más que un romance.
Años atrás, Soldini hizo un documental, "Per altri occhi", sobre las aventuras cotidianas de un grupo de ciegos. Uno de ellos, excelente profesional osteópata. Cambiando el género, acá nos presenta a una osteópata que perdió la vista en plena adolescencia, pero no por ello perdió las ganas de vivir, ni de querer. Un tipo exitoso la descubre y se siente atraído por ella. Pero es como el patotero sentimental del tango de Manuel Romero, que en su vida tuvo "muchas, muchas minas, pero nunca una mujer". Las engancha, les miente para no hacerlas sufrir, y al final, aunque no quiera, las hace sufrir. Empezando por la madre, a quien hace rato que no visita.
Así, en esta historia no todos los que tienen vista saben ver, y no todas las ciegas son "pobrecitas". Buena historia de aprendizajes, contada con respeto, mano experta, momentos risueños, personajes que evolucionan (por ejemplo, una jovencita peleada con el mundo), un trasfondo para pensar y un final delicado, de cierre sensual y poético. En composición admirable se luce Valeria Golino. No le va muy en saga su partenaire Adriano Giannini. ¿Le suena ese apellido al espectador? Sí, es el hijo de Giancarlo Giannini, en versión físicamente mejorada. Locaciones en el quartiere Flaminio de Roma y barrios vecinos.