Género
Prolífico y audaz como pocos, Pécora sigue haciendo sin descanso cortos, medio y largometrajes en los que combina su pasión por el cine clásico, por la fotografía, por la literatura, por lo narrativo y por lo experimental. Aquí, se mete con el vampirismo (y el canibalismo) a partir de la historia de cuatro amigas depredadoras que conviven en una decadente mansión. Súpero 8 + blanco y negro + color + efectos que remedan la estética (y las copias gastadas) de las primeras películas mudas. Pécora juega al (y con el) cine, apelando a todas sus posibilidades estéticas (las texturas y los contrastes de las imágenes) y un relato cuyo tono y climas remedan a los de los surrealistas. Una buena decisión la de incluir en la sección Vanguardia y Género del último BAFICI los 35 minutos de Las amigas, que son, efectivamente, tanto de “vanguardia” como también de “género”.