El poder de una historia
Biopics sobre el ex primer ministro británico Winston Churchill existen varias, por lo cual, desde un primer momento, y a pesar de ser un personaje sumamente interesante e importante a nivel mundial, Las horas más oscuras (Darkest Hour, 2017) se podría considerar una más del montón. Sin embargo, hay algo que la destaca y la hace superior a todas las anteriores. Mejor dicho, hay “alguien”, una sola persona. Estamos hablando del actor Gary Oldman.
La magnífica interpretación de Oldman como el ex primer ministro británico, un papel difícil si los hay, es sin dudas lo más destacado de esta biopic centrada en apenas unos luego de la asunción de Churchill. No solo debió adentrarse en una caracterización muy particular por el estilo de vida del personaje (alcoholismo, comida chatarra, descuido por su salud y bastante fanfarrón) sino que también implicó un gran cambio físico con ayuda de maquillaje, claro está.
Ya hemos visto a Churchill ser caracterizados en otras biopic o películas como en Bastardos sin gloria (Inglourious Basterds, 2009) o la serie The Crown, pero lo que hace Oldman es algo excepcional llevando a su personaje por todos los estados de ánimos, desde el enojo y desprecio a sus pares hasta la preocupación que le llevó no poder lograr sus objetivos y los emotivos discursos que le permitió ganarse la confianza no solo de un país, sino de gran parte del mundo en medio de la segunda guerra. Si bien la película no es la gran favorita para ganar la estatuilla en la máxima categoría, sí lo es su actor dentro de su categoría.
Algo más que se destaca de Las horas más oscuras, producida por Joe Wright (Orgullo y prejuicio) y guionada por Anthony McCarten (La teoría del todo) es su conexión con la última película de Christopher Nolan, Dunkerque (Dunkirk, 2017) la cual relata la Operación Dinamo (acción militar llevada a cabo por Reino Unido bajo el mando de Winston Churchill con el objetivo de evacuar a 400 mil soldados de la costa francesa mediante botes civiles luego de ser invadida por la Alemania nazi en el marco de la Segunda Guerra Mundial). Como indica su nombre, Dunkerque está ambientada en la ciudad costera de Francia y con la perspectiva de los soldados que esperan ser evacuados. Ya sea por casualidad o causalidad, Las horas más oscuras nos relata que pasaba durante el mismo periodo de tiempo en Inglaterra, desde que Winston Churchill asume como Primer Ministro hasta que se lleva a cabo la Operación Dinamo, mientras es presionado a firmar la paz con Hitler, por lo cual ambas películas forman un excelente combo relatando el mismo hecho desde dos ambientes y perspectivas diferentes. Además, ambas están nominadas a la categoría de mejor película en los Oscars, ya que como sabemos a la Academia les encantan las películas basadas en historias reales que involucren guerra y política.
*Crítica de Brian Bahar.