Las mujeres del 6° piso

Crítica de Alejandro Castañeda - El Día

OTRA LIVIANA COMEDIA

Sorprende que esta película haya tenido tanto éxito en Francia. Porque es tan candorosa, tan antigua, tan estereotipada, que uno tiene la sensación de estar viendo una tonta comedia rosa del cine nacional de allá lejos y hace tiempo. La historia es simple y forzada: estamos en los años 50, en París, un burgués vive en la planta baja de un edificio, y en el 6° piso se apiñan como pueden seis mujeres españolas que llegaron escapándole a Franco y que trabajan como domésticas en hogares parisinos. El libro es maniqueo, lleno de lugares comunes. El burgués bien pensante aprenderá de ellas la frescura, la espontaneidad, la solidaridad y el amor. Porque este buen señor, embalado por el salero que llega desde el 6° piso, un día deja a su esposa, abandona el trabajo, se muda con las extranjeras y hasta se enamora de una de ellas, linda, esbelta, buenísima y ubicada. Livianísima comedia, que va de lo romántico a lo costumbrista y que, de paso, nos ofrece unas francesas insensibles y tilingas y unas españolas cálidas y vulgares.