Kate (Katarina) es una joven que, tras salir de una grave enfermedad, no logra re armar su vida. Sin un lugar donde vivir, perdiendo amigos de a poco, y al borde del despido, conoce al joven Tom, quien se muestra muy interesado en ella, y, sobre todo, en ayudarla a salir adelante. La magia de la navidad, época en la que transcurre la historia, se va a hacer presente.
Last Christmas: otra oportunidad para amar llega como el clásico film en co producción entre USA e Inglaterra que todos los años nos aparece en época navideña. Esta vez por suerte no es una historia coral, sino que se centra, casi en su totalidad en Kate, el personaje interpretado por Emilia Clarke.
Lo primero que tenemos que decir, es que el que vaya buscando una comedia romántica al uso, le vamos diciendo que no; ya que la historia se acerca más a la auto superación y encontrar nuestro lugar en el mundo, que el de la magia navideña solo sirviendo para encontrar pareja.
En este sentido la elección de Emilia Clarke es bastante irregular. Por un lado, la actriz británica logra transmitir a la pantalla su carisma y simpatía vista fuera de cámara; pero, por otro lado, al tener más de un momento emotivo, nuestra ex Khaleesi demuestra lo limitada que es cuando la trama la exige algo más que sonreír.
En este sentido se echa en falta algún secundario de bastante peso. Si bien tenemos a Michelle Yeohcomo la jefa de Kate, y en más de un momento, y sin mucho esfuerzo logra comerse la película, su participación es bastante escasa, sirviendo casi como alivio cómico que como un real apoyo moral para Emilia Clarke. Y lo mismo podemos decir de Emma Thompson y casi la totalidad de los secundarios.
A esto debemos sumarle un giro de guion que se ve venir a los quince minutos de película, cuando se nos presenta todo el trasfondo de Kate. Es una pena que la historia se centre tanto en este momento, en lugar de hacer más hincapié en la auto superación de dicho personaje; algo que solo se ve con un par de escenas de montaje y poco más.
Last Christmas: otra oportunidad para amar es de esas películas “buenaondistas” con todas las ñañas de las comedias familiares inglesas. Mucho humor naif, bastante azúcar, y drama liviano como para compensar tanta melosidad, pero que desaprovechan algunas buenas ideas. Para verla en familia para pasar un momento ameno en el cine, y poco más.