Llega diciembre y con él las películas navideñas, por supuesto, románticas. Last christmas, otra oportunidad para amar, tiene dos virtudes indiscutibles: la belleza de Londres iluminada y la canción de George Michael como fuente de inspiración. En ella se basó Emma Thompson, guionista, productora y madre de la protagonista, una chica llamada Kate -Emilia Clarke- que trabaja como empleada vestida de elfa y tiene poca suerte como aspirante a cantante. Las cosas le van mal, en parte por su propia torpeza a la Bridget Jones, que se supone muy graciosa. Entonces conoce a Tom, que es lindo, bueno, ayuda a los pobres y la adora. Así que a ella le parece casi demasiado perfecto para ser verdad. Menor, y modestamente simpática.