Latin Lover

Crítica de Rolando Gallego - Lúdico y memorioso

Apariencias

Al cumplirse un nuevo aniversario de su muerte, las hijas de la megaestrella italiana Saverio Crispi, deciden realizarle en conjunto con las autoridades del lugar en donde nació, un sentido homenaje con una retrospectiva sobre su carrera.

Así comienza la comedia "Latin Lover" (Italia, 2015) de Cristina Comencini, un filme que deambula en el vodevil, el srewball y la tragicomedia, para intentar configurar el reencuentro de las hijas del actor en medio de un evento que puertas afuera debe ser una dedicada y cuidada celebración.

Pero claro está que el guión aprovechará las diferencias entre cada una de las hijas y sus madres para construir un relato en el que nada ni nadie será lo que realmente aparenta o dice ser.

Si la hija mayor (Angela Finnocchiario) es la más abocada a la preservación del material fílmico y la más responsable, la que le sigue en edad (Valeria Bruni Tedeschi) será la que compartirá profesión con Saverio, pero también la que más recelo de las otras tenga, la heredera española (Candela Peña) aportará sus dotes familiares negando la realidad y por último la más pequeña (Phila Viitala) intentará acercarse al resto sin saber muy bien qué es lo que quiere.

Una última hija norteamericana (Nadeah Miranda) que nunca llega y la revelación de una posible heredera más (hija de la cocinera de la casa de Saverio) sólo complicarán más la reunión en la que las revelaciones que Rita (Virna Lisi) y Ramona (Marisa Paredes), madres de Susanna (Finnocchiario) y Segunda (Peña), respectivamente, aportarán el tono necesario para que la narración dispare contrapuntos que posibiliten la acción.

"Latin Lover" va configurando su historia con una dirección de cámaras casi teatral, que pese a algunos juegos al inicio y al final (cuando comienza la película vemos como una mujer abre cada ventana de la vieja casona de Saverio, cosa que también vemos pero cerrándolas al finalizar) no se destaca por un virtuosismo, sino todo lo contrario.

Pero esta decisión se debe a que, claramente, el foco de "Latin Lover" está puesto en la actuación, en el duelo entre las mujeres de varias generaciones, que aportan cada una desde su lugar, lo necesario para mantener el interés en la historia.

Al reparto femenino se sumarán algunos actores, entre los que destaca Lluis Homar como Pedro, un amigo de toda la vida de Saverio, quien tendrá la responsabilidad de revelar el dato más importante del filme, aquel que generará todo el twist de la historia.

"Latin Lover" es una película simpática, bien actuada, en donde la exageración, el desborde y el timing preciso del gag, sirven para que comencini pueda construir un relato sobre la familia, la paternidad, los hijos y la fama. Pero también para poder hablar de la fundación de mitos de celuloide que terminan por desvanecerse ante revelaciones imprevistas sobre la identidad y el pasado de los mismos.

PUNTAJE: 6/10