Astronautas. Recogen algo del espacio. Ese “algo” podría ser el mayor descubrimiento de la Humanidad: la prueba de vida extraterrestre. Bueno, sí, es eso y también un ser fortísimo y mutante que se podría cargar al planeta entero y que estos astronautas –bastante ilusos, pero eso no es un defecto sino algo que deja sentado el film– deben enfrentar jugándose la vida. Si le suena a “Alien” es porque es prácticamente la misma historia. Pero lo que cuenta es cómo ese mito reaparece con personajes más interesantes –por sus falencias, especialmente– que los del film de Ridley Scott. Y también porque el costado “aventura” es mucho más dinámico y efectivo, cabalgando en la intención de evitar simbolismos y discursos (vamos: están la bella Rebecca Ferguson de la quinta “Misión Imposible” y Ryan “Deadpool” Reynolds, seguramente hay dinamismo). Para ir sin miedo.