Statham contra el "white trash"
"Homefront" es la nueva película de acción del pelado Jason Statham en la que interpreta el rol de un ex agente encubierto de narcóticos que luego de un gran golpe contra el narcotráfico, se ha retirado y busca llevar una vida tranquila junto a su pequeña hija en un pueblo sureño de los Estados Unidos.
Como es de esperarse, no todo fue tan tranquilo. Un día que parecía rutinario, a la pequeña Maddy se le cruzó un grupo de niños que pretendían hacerle bullying, pero lo que no sabían es que se estaban metiendo con la hija de un ex agente de la DEA. La niña, lejos de amedrentarse, les hace frente y le da una paliza al líder, lo que desata todo el lío que se arma después. Con respecto a este interruptor del nudo argumental debo decir que es un tanto simplista, por no decir pobre. Justo coincide que la madre (Kate Bosworth) del niño que recibe la paliza es la hermana adicta de un dealer áspero (James Franco) del pueblo que resulta tener contacto con los narcos a los que el personaje de Statham, Broker, metió en prisión. Más allá de este desenlace no muy creíble, la película se las arregla para mantener entretenido al espectador con muchas peleas a puño limpio y tensión.
La secuencia del inicio en la que nos presentan al pelado (con pelo) de infiltrado y luego desatando el infierno entre los narcos es muy buena, dinámica y con mucha acción, aunque luego esto decae por un rato largo hasta que se desata el conflicto comentado más arriba. Al principio el conflicto con la familia "white trash" se centra en lo verbal y loa amagues, pero luego la resolución de va tornando más física.
El director Gary Fleder ("Tribunal en fuga", "Besos que matan") hace un buen trabajo con el guión de Sylvester Stallone (sí, el mismísimo) que sin ser muy complejo u original, logra mantenernos entretenidos, algo que ya se está volviendo una marca registrada de esta leyenda del cine de acción en materia de escritura.
El cast reunido fue bastante bueno, incluyendo nombres interesantes como James Franco, Winona Ryder, Kate Bosworth y Frank Grillo además del ya mencionado Jason Statham. Todos hacen un buen trabajo, sobresaliendo su protagonista máximo que le viene metiendo pata para ver si llega a ponerse a la altura de lo que fueron en su momento Arnold, Sylvester, Van Damme o Willis.
El film mezcla momentos de suspenso bien logrados con mucha acción cuerpo a cuerpo, algo que siempre resulta fresco ver en estos tiempos de CGI sin límites.
Sin ser una maravilla, logra su cometido y entretiene con acción de buena calidad. Una buena opción para seguir viendo crecer la carrera del áspero Statham.