En el relato del perfeccionamiento de plantas que podrían ayudar a personas con problemas psiquiátricos, pero que luego termina por afectar a aquellos involucrados en el proceso, se configura una oscura trama sobre el control y la manipulación que celebra su forma distópica para adentrarse en el drama y la tragedia. Kit Connor y Emily Beecham se destacan en una sombría propuesta.