Una perfecta forma de educar a los padres retrógrados que creen que el amor es únicamente heterosexual. Y ayuda a que el espectador pueda ver con los ojos de los padres del protagonista, dando cuenta de que lo importante es lo que hace felíz a cada uno.
Call Me By Your Name es la nueva película de Luca Guadagnino. Con guion escrito por James Ivory y basado en la novela de André Aciman. En ella retractan un verano en la vida de Elio (Timothée Chalamet) donde conoce a Oliver, (Armie Hammer) un estudiante/asistente hospedado por su padre. A partir de allí se desencadena una hermosa historia de amor entre dos hombres en la Italia de 1983. La película es un drama romántico con 132 minutos de duración.
El director se concentra en sus dos personajes principales, dejando de lado (circunstancialmente) a la familia de Elio, como también a los amigos/as. De esta forma crea un ambiente donde uno depende del otro -sea quien sea-, y se siente tanto con euforia cuando están juntos como la desazón cuando se distancian.
Es interesante este dúo, ya que Elio tiene tan solo 17 años y ninguna experiencia sexual previa. En cambio Oliver pareciera ser un hombre, con varias prácticas en su haber. De forma que comienza manejando el coqueteo desde un lugar privilegiado. El director así lo demuestra filmando con planos contra-picados, haciéndolo ver más grande de lo que en realidad es.
Lejos de poner en foco una relación homosexual cliche, la historia se concentra en demostrar un amor innegable a los ojos, en el cual los límites se los pone cada uno para sí mismo. Y como toda narración de este tipo, el desamor y la separación es una carta imponente para el dramatismo.
Una excelente actuación de Timothée Chalamet que deslumbra en cada minuto que aparece en pantalla, ayuda a conocer a Elio, y de esa forma saber exactamente lo que busca o anhela el personaje. Claro que esto se logra por un guion sólido que no deja nada al azar ni tirado de los pelos, todo fluye con naturalidad. La fotografía y dirección de arte acompañan de muy buena forma al relato. Desde comienzo a fin, pareciera ser 1983 “en algún lugar de Italia” como dice la pantalla al inicio del film.
Dos padres con mentes abiertas, ayudan a Elio a poder vivir plenamente, libre de prejuicios. Lo cual sería lo ideal para cada persona respecto a sus gustos sexuales. Esta historia es una perfecta forma de educar a los padres retrógrados que creen que el amor es únicamente heterosexual. Y ayuda a que el espectador pueda ver con los ojos de los padres del protagonista, dando cuenta de que lo importante es lo que hace felíz a cada uno.
Es para celebrar que una película con este contenido haya sido nominada en los Oscars 2018, para que se difunda y aprecie. Llámame por tu nombre tuvo cuatro nominaciones: Mejor película, Mejor guion adaptado, Mejor actor (Timothée Chalamet) y Mejor canción original (Mystery of love, interpretada por Sufjan Stevens).