Irreconciliabes diferencias
Las relaciones tirantes entre directores y actores en el rodaje de una película no son ninguna novedad y forman parte del folklore del cine. Pero poco se conocía sobre la despótica relación entre Carl Dreyer y la francesa María Falconetti, protagonista de uno de los films más emblemáticos de la historia como La Pasión de Juana de Arco (1928), que contó entre otras singularidades con la actuación de Antonin Artaud y hoy es considerado uno de los mejores films de todos los tiempos.
En este documental, Llamas de nitrato -2015-, el aporte de datos y material de archivo compuesto de fotos, a la vez de recreaciones dramáticas, logramos conocer el derrotero de la actriz María Falconetti, tras el calvario de la filmación de la obra del director danés, su descenso y ocaso con escala obligada en Argentina, para morir en la más absoluta soledad y pobreza.
Llamas de nitrato consigue así reivindicar su figura y homenajearla como corresponde, teniendo en cuenta que de Carl Dreyer no se conocía tanto en relación a sus vínculos con la actriz y a la falta de gratitud con su trabajo.