Asi como la primera entrega resultaba una heredera natural del cine catástrofe, esta hermosa secuela animada, es un homenaje a las cintas de monstruos gigantes, sobre todo a JURASIC PARK, filme que emula con gracia en varias secuencias.
Colorida, graciosa, bellamente filmada, es una cinta que cautiva por sus decorados de cuento, sus personajes, plagados de matices, y por un humor que nunca deja de lado al publico adulto. Una de esas cintas que los mayores disfrutan a la par de los niños. Gags efectivos, un guion inteligente y una fauna alimenticia que parece salida de un viaje de LSD, hacen de esta secuela, un entretenimiento que nadie debería dejar pasar.