Una catástrofe puede destruir la felicidad de varias familias y cambiar su destino en poco tiempo.
Este relato viene de la mano del cineasta catalán Juan Antonio Bayona (37) taquillero por “El orfanato”, una historia de terror y suspenso. Ahora trae a la pantalla grande esta historia basada en hechos reales, que le costó cerca de 30 millones de euros. En “Lo imposible” vemos la increíble historia de supervivencia de una familia española los Álvarez y Belon, (en el relato su origen fue cambiado por americanos).
Todo surge a partir de una tragedia ya histórica que sucedió el 26 de Diciembre de 2004. Un tsunami arrasó la costa del Sudeste Asiático; Indonesia, Sri. Lanka y Tailandia, entre muchos otros países, (con sus correspondientes réplicas). Una ola gigante que azotó la playa repleta de turistas y sus alrededores, dejando un importante saldo más de 250.000 muertos y varios desaparecidos. Aún todo se recuerda con mucho dolor. Creo que las personas que vivieron esta situación jamás la olvidaran.
Este fenómeno destruyó a familias enteras que se bañaban felizmente en las piscinas de los hoteles, también a aquellos que disfrutaban de la arena. Aquí la protagonista de esta penosa historia es una familia de clase alta compuesta por María y Henry (Naomi Watts y Ewan McGregor) y sus tres hijos Lucas, Thomas y Simón (Tom Holland, Samuel Joslin y Oaklee Pendergast), quienes habían decidido pasar una Navidad distinta (desgraciadamente resulto ser algo impensado), en un paraje exótico en Tailandia.
Se encuentra bien narrada, la lucha de este matrimonio por poder reencontrarse todos, surgen los desencuentros y la desesperación de tanta incertidumbre, que la transmiten a la platea. Con muy buenas actuaciones de los protagonistas y el joven actor Tom Holland, conmueven (aunque no tengan un guión a su altura de Watts y McGregor), hasta tiene un pequeño papel Geraldine Chaplin, y es bastante melodramática.
Aquí el director incursiona en la catástrofe y la tragedia, con largas secuencias de este fenómeno, donde tiene un gran plano general cuando aparece esa gran ola, arrasando todo al igual que “Más allá de la vida, 2010” de Clint Eastwood (el tema abordaba otras situaciones); después distintas personas incluyendo los protagonistas, luchando para sobrevivir, apelando al golpe bajo a partir de secuencias terribles (sangre, cadáveres, niños perdidos, cuerpos mutilados, etc.). Considero una idea desacertada nombrar a una compañía de seguros en tal horrorosa situación. Aportan su profesionalismo la fotografía de Oscar Faura (“El Orfanato”, “El cuerpo”) y la música de Fernando Velázquez.