Esta es la opera prima de Cristian Barrozo. El protagonista de esta historia se encuentra oprimido por distintas encrucijadas de la vida que tiene que asumir y la cámara sigue a los intérpretes y los lugares donde se mueven de manera pausada, con toques de documental. Cuenta con muy buenas actuaciones y personajes bien construidos aunque su guión resulta un poco débil y antes del final comienza a desvanecerse.