¿Película de terror argentina? Sí, claro, por qué no: debería ser un género obligatorio para dar catarsis a los horrores que nos persiguen. Pero es escaso. En este caso, se trata de un viejo secreto del pasado que perturba a una mujer al volver a su pueblo natal. Un esquema conocido, claro, pero que en algunas secuencias de este film aparece resuelto de manera efectiva y creíble. Un intento quizás no logrado pero que no carece por completo de valores, tanto en la dirección como en el diseño.