Impulsada por el éxito de la primera parte -que resultó uno de los lanzamientos animados independientes más taquilleros de la historia- es que llega The Nut Job 2: Nutty By Nature, secuela no solicitada para un producto estanco, que puede tener ciertos elementos que den cuenta de una mejora en relación a la anterior, pero que no logra sobreponerse a la carencia de originalidad que caracteriza a ambas. Retomando algo de tiempo después de los eventos de la otra, todos los animales del parque se dan la gran vida en el sótano de la tienda de nueces, engordando a base de las accesibles delicias y olvidándose de su naturaleza en el proceso. Eso hasta que una explosión los deja peor que antes, dado que ahora que probaron el cielo de los roedores no están dispuestos a volver al parque sin más.