Sin dudas “Logan” fue la mejor película basada en un comic de este 2017. Ya es una tendencia hace algunos años contar con por lo menos cinco propuestas de esta índole anualmente. Esto está conduciendo a un agotamiento del género y del público ante la gran oferta y la poca originalidad reinante. Sin embargo, cada tanto aparecen algunas cintas que sorprenden por su frescura, su rebeldía y la incomparable confección de una historia superheroica. El año pasado, “Deadpool” fue la ganadora de esta visión tan distinguida y en esta ocasión, “Logan” es el gran cóctel comiquero, transgresor y original que esperábamos.
El film nos presenta un futuro cercano donde vemos a un Wolverine (Hugh Jackman) envejecido cuyos poderes comienzan a desvanecerse. Un individuo realmente vulnerable. Después de una vida de dolor y angustia, sin rumbo y perdido en el mundo donde los X-Men son leyenda, su mentor Charles Xavier (Patrick Stewart) lo convence de asumir una última misión: proteger a una joven que será la única esperanza para la raza mutante.
Este capítulo final de la historia del mutante favorito de todo el mundo, compuesto por el actor australiano que lleva 17 años interpretándolo, marca el cierre de una etapa para Fox y para el propio Jackman. James Mangold (“3:10 to Yuma”, “Walk The Line”) fue el responsable de dirigir esta especie de western moderno de acción donde Logan deberá emprender un arduo camino que lo lleve a la redención.
La película está muy ligeramente basada en el comic “Old Man Logan” de Mark Millar (“Kick Ass”), y se presenta como un western post-apocalíptico donde los mutantes fueron diezmados al punto de que rozan la extinción. “Logan” nos presentará su aventura más cruda, violenta, y visceral, haciéndole justicia al material de origen, logrando alcanzar una calificación R.
Esta cinta se coloca en el olimpo de los films de superhéroes gracias a un guion sencillo pero sólido, una impecable dirección de Mangold, consiguiendo buenas interpretaciones del elenco, entre los que se destacan Stewart y Jackman, pero principalmente obteniendo una revelación actoral en el personaje de X-23, compuesto por la debutante Dafne Keen. La actriz española de 12 años se anima a actuar de igual a igual junto a Hugh, poniéndole el cuerpo a un personaje muy físico y de pocas palabras. Su composición de la pequeña mutante sorprende y augura una interesante carrera por venir.
Resulta realmente atractivo el enfoque adulto y maduro que le dieron a esta historia, logrando que este producto se separe de la media de relatos inspirados en historietas y novelas gráficas. Wolverine es uno de esos personajes que pedían a gritos una mirada distinta y más violenta, siendo finalmente Fox quien se anime a dar un salto a nivel narrativo.
En síntesis, “Logan” representa una gran carta de despedida para Hugh Jackman, que consigue retirarse del universo X-Men a lo grande. Un film cargado de secuencias de acción espectaculares, con buenas actuaciones, una lograda dirección de fotografía de John Mathieson (“Gladiator”) y una estupenda dirección de James Mangold. Un relato épico y emotivo que no economiza ni en espectacularidad ni en una narrativa interesante. La película de superhéroes diferente que esperábamos hace tiempo.