La fuerza del corazón
¿Alcanza con una buena película para ayudar a solucionar, o al menos a apoyar, la solución de una causa que implica la posibilidad de cambiar el destino de miles de chicos que necesitan de una familia que los ayude a crecer y los proteja? Parece que sí. A veces una forma de hacer visible una problemática tan fuerte a través de un medio que hará que la misma pueda llegar a ojos (y oídos) de una gran porción de la población es una de las cosas más efectivas que pueden hacerse. ¿Y qué mejor que la herramientas sea una película de género comedia, con una construcción sólida de la historia a narrar, elástica cuando es necesario, y con un elenco que sería la envidia (sana, pongamos) de cualquier director que se precie?
Todo eso y más es Los adoptantes, una historia divertida pero con un drama real que la atraviesa, y, detrás de esos pasos excelentes de comedia, expone las cuestiones de los miles de chicos que ingresan a diario al sistema de adopción en espera de una familia.
Todo lo que describo es llevado adelante con perfecta mano por la dirección de Daniel Gimelberg, y gracias al trabajo realizado por él en el guion junto a Andi Nachon, Los adoptantes logra en la distribución de las distintas partes del rompecabezas que, con una idea de un humor logrado con mano efectiva y buena noción de los tiempos en la construcción de la estructura de la historia, logra desarrollar con solvencia las diferentes partes de una mecánica que también es maleable cuando es necesario.
La semblanza de las diferentes patas participantes de la historia en sus capas paralelas es sencilla en términos de demostración de las ideas y sentimientos de los personajes, pero a la vez efectiva, y su forma e historia vincular perfectamente desarrollada. Es así que la pareja conformada por Martín (Diego Gentile), un conductor de televisión súper exitoso, y Leonardo (Rafael Spregelburd), un ingeniero agrónomo con un ligero mal genio, comienzan a plantearse nuevas posibilidades en su vínculo como pareja, planteándose la idea de la adopción. Las situaciones equívocas no tardarán en llegar y ello se ve real en la piel de la selección de las diferentes partes protagonistas del cuento que la pantalla nos ofrece.
Las actuaciones secundarias hacen honor y secundan con perfecta asistencia a la ya mencionada, y excelente, pareja protagónica: Soledad Silveyra, Marina Belatti, Guillermo Arengo, Mario Alarcón, Florencia Peña, Agustín Aristarán y Valeria Lois otorgan la forma justa para cerrar armoniosamente el mundo de Los adoptantes.
Los adoptantes es una armoniosa historia sobre una pareja, sus desavenencias, sus necesidades y deseos acompañada en la forma de una construcción de circunstancias que incorporan de manera excelente a los personajes secundarios en la estructura de una realidad que es necesario visibilizar.