Introducción al animé
Los caballeros, que protegen al mundo del mal, ofrecen una aventura construida para los fanáticos que no defrauda. Gran despliegue visual y una valorable cuota de humor.
Saint Seiya, conocido en español como Los Caballeros del Zodíaco, es un manga de acción creado en 1986 por Masami Kurumada y publicado originalmente en enero de 1986 en la revista Shuukan Shounen Jump de la editorial Shüeisha. Manga es el nombre que se le da la historieta en Japón y el volumen de este género es prácticamente inabarcable para quien no decida dedicar su vida a investigar el tema. Incluso Los caballeros del Zodiaco es una historieta bastante grande publicada entre 1986 y 1990. Fue adaptado posteriormente en una serie de animé de ciento catorce episodios. Fue a través de la televisión que su éxito superó ampliamente las fronteras de Japón y se convirtió en objeto de culto por gran parte del mundo. Toda clase de derivados se fueron multiplicando en los más variados formatos, llegando a media docena de films, de los cuales Los Caballeros del Zodiaco: La Leyenda del Santuario (2014) es el último. Sin duda, es muy difícil acercarse a un universo tan vasto y complejo, pero como cualquier largometraje, el que hoy se estrena debe tener vida propia y funcionar o no de forma independiente. Los caballeros que desde tiempos inmemoriales han protegido al mundo del mal, vuelven aquí para ofrecer una aventura que sin duda está construida para los fanáticos, los que serán más críticos y a la vez más leales a la saga. Para los demás espectadores, hay muchos saltos y elementos que llaman a la confusión. Pero el film intenta explicar todo lo que puede la trama y avanza de forma que aun con la falta de información puede disfrutarse. La película comienza con Saori Kido, una niña preocupada por sus misteriosos poderes quien es salvada por un muchacho, Seiya, del ataque de un asesino. Saori se da cuenta de su destino y su misión y decide ir al Santuario con Seiya y su compañía de Caballeros de Bronce. En el Santuario tendrán que emprender una feroz batalla contra los más grandes caballeros, llamados Caballeros de oro. Lo mejor que tiene la película es el despliegue visual, las impresionantes armaduras y la forma en que se van presentando. Para los no acostumbrados a esta clase de cine, tal vez sea una sorpresa el tipo de humor absurdo que la película tiene, pero se trata de una de sus mejores características. Los viejos defensores sabrán disfrutar de esta nueva película y los que no conozcan nada de este universo se sorprenderán mucho con las imágenes, aunque es difícil que muchos de estos últimos se acerquen al cine a verla.