La prehistoria con mirada infantil
Spielberg ya produjo dos versiones con actores de "Los Picapiedras" y ahora a través de su estudio Dreamworks produce una nueva historia de otra familia de cavernícolas más cercana al espíritu de los cartoons del siglo XXI. La historia está contada desde el punto de vista de la hija adolescente de la familia, que vive desde hace años sin vecinos y encerrada en una caverna, atemorizada por todo signo de algo nuevo o desconocido, que en ese contexto significa invariablemente un peligro inmediato.
Pero la adolescente prehistórica está harta de vivir encerrada y de no conocer nada nuevo, y una noche, al ver el reflejo de una luz que ilumina la roca que tapa la entrada a la gruta, corre a conocerla. A quien conoce es a un simpático hombre con casi todas las características del homo sapiens, que domina el fuego y le advierte a ella y a su familia que la tierra está cambiando con terremotos y mares de lava, y que ya no estarán seguros en su caverna. Lo que sigue es una peregrinación a tierras más seguras, a lo que se suma el aprendizaje de las nuevas ideas que el recién llegado tiene para enseñarles.
"Los croods" no es precisamente "La guerra del fuego", pero de un modo infantil intenta un divertido acercamiento a la vida prehistórica. El guión más bien endeble y minimalista no es el fuerte del film, que apuesta todo a lo visual, con una utilización realmente eficaz del 3D y un colorido que aprovecha al máximo las posibilidades de la animación digital. Lo más difícil para los guionistas debe haber sido adaptar la brutal idiosincrasia del hombre prehistórico al marco de un film de animación infantil, y se nota en algunas escenas que lucen ingenuas, incluso, para los espectadores mas chicos. En todo caso, el colorido, los efectos 3D y algunas escenas de cacería realmente vertiginosas equilibran el conjunto.