Sin un éxito en la taquilla desde comienzos de la década del 90, Sylvester Stallone decidió recurrir a la nostalgia para intentar recuperar el lugar que ocupó en los años 80 como una de las figuras más importantes del cine de acción.
Volviendo a interpretar los dos personajes más reconocidos de su carrera, primero, en 2006 con Rocky Balboa y luego, en 2008 con Rambo, nos entregó un último capítulo en las historias de estos iconos que tanto disfrutamos a lo largo de los años.
El modesto éxito de estas nuevas entregas le permitieron a Stallone escribir y dirigir este nuevo proyecto, "The Expendables", en el que homenajea el cine de acción que lo hizo famoso.
Para esto, reunió a viejas figuras de los años 80 (Lundgren, Roberts, Rourke, Willis, Schwarzenegger) y algunas otras actuales (Statham, Li, Austin) quienes se combinan en una entretenida película de acción estilo ochentoso.
Sólo Stallone es capaz de juntar tantos nombres en un mismo film.
La idea original era contar también con otros tres referentes del cine de acción: Jean-Claude Van Damme, Chuck Norris y Steven Seagal, pero estos rechazaron la invitación, quizás para continuar haciendo lamentables películas editadas directo-a-dvd.
El guión, escrito por Stallone y Dave Callaham, presenta una historia simple, sin pretensiones ni vueltas, que sirve como base para plantear las secuencias de acción.
Stallone y sus amigos conforman un grupo de mercenarios que son contratados para derrocar a un malvado dictador en un país imaginario de Sudamérica.
Una vez más, se hace una lamentable representación de un país del Tercer Mundo, comandado por un dictador con un aire a Hugo Chávez y con supuestos habitantes sudamericanos que no saben hablar bien español.
Dejando de lado un guión cargado de clichés, lo que realmente importa es ver a todos estos "héroes de acción" haciendo lo que mejor saben. Y en esto, "The Expendables" no defrauda.
Stallone utiliza todo el catálogo (explosiones, persecuciones de autos, aviones, peleas, tiros y más explosiones) para crear una catarata de secuencias de acción que no dan respiro.
Pareciera que el viejo Sylvester pensó... "déjenme mostrarles cómo se hacía esto en mi época".
Estas impresionantes secuencias permiten que cada uno de los actores tenga su escena de acción, entregándoles un momento para destacarse, aunque luego el protagonismo en la historia no sea parejo.
Principalmente, ésta es una película de Stallone, quien con 64 años continúa demostrando ser un icono del género. Aquí interpreta al líder del grupo y es el que más tiempo en pantalla tiene.
Jason Statham es su mano derecha, acompañando como segundo protagonista.
Algunos momentos de humor aparecen gracias a la rivalidad constante que existe entre ellos.
Jet Li y Dolph Lundgren tienen roles acotados y únicamente se destacan durante un enfrentamiento entre ambos.
Mickey Rourke no participa de la acción, pero se luce en uno de sus momentos con un pequeño monólogo.
Eric Roberts tiene el papel más interesante, interpretando genialmente al corrupto James Munroe.
David Zayas (Angel Batista en "Dexter") cumple una floja actuación como el General Garza.
Otros como Terry Crews, Steve Austin y Randy Couture tienen pocas lineas y no aportan nada mas allá de la acción.
La esperada reunión entre los tres iconos (Stallone, Willis, Schwarzenegger) se limita a una pequeña escena en donde se cruzan algunos chistes y nada más. Igual es genial ver a estos tres grandes juntos en la pantalla grande, aunque sea sólo por pocos minutos.
Stallone tiene otra franquicia en manos. Considerando que nunca tuvo inconveniente en continuar sus personajes (10 films entre Rocky y Rambo lo confirman), no desaprovechará esta nueva oportunidad con varias "The Expendables" que pronto llegarán.