Es un relato que conmueve, te deja pensando y lleva a la reflexión. Pone al descubierto a cierta clase y su complicidad con la última dictadura en Chile. Cuenta con la buena actuación de la actriz chilena Antonia Zegers (“No”, “La memoria del agua”) y el resto del elenco acompaña correctamente. Una buena revisión siendo este el segundo largometraje de Marcela Said. Fue exhibida durante la Semana de la Crítica del Festival de Cannes,