Una entretenida y efectiva secuela, destinada al público más pequeño y a los adultos nostálgicos. La fusión de acción en vivo con personajes digitales ha mejorado mucho con respecto a la primera entrega. Sumado esto, a la grandilocuencia de los escenarios elegidos para desarrollar la historia (París y sus lugares más emblemáticos) hacen del filme, una experiencia disfrutable. Gargamel y su gato Azrael siguen siendo los personajes más divertidos y logrados, de una cinta cuyo punto más flojo es la larga duración del metraje. Pese a esto LOS PITUFOS 2, con su tono naif, se disfruta.