Gran cumbre de superhéroes
Los superhéroes de Marvel vienen apareciendo en películas cada vez mejores. Pero aun si tomamos lo mejor de «Capitán América», «Thor», «Iron Man» o la segunda versión de «Hulk», de todos modos no se lograría transmitir lo bien que le salió este «The avengers», algo así como el sueño del fan del comic hecho realidad.
«Los vengadores» resulta sorprendente no solo por maravillas más esperables como los alucinantes efectos especiales o el imaginativo uso del 3D digital, que aprovecha cada ángulo y encuadre para potenciar la estereoscopia como no se veía desde el «Avatar» de James Cameron. Estos rubros, o la música de Alan Silvestri y los efectos de sonido están excelentemente aplicados a esta historia de fantasía y superacción. Pero lo que sorprende es otro tipo de elementos, por ejemplo la construcción de un guión que se toma todo el tiempo necesario para armar bien la creación del sexteto de superhéroes protagónico (Iron Man, Hulk, Thor, Capitán América, Black Widow y Hawkeye) motivar al villano Loki o cuestionar los secretos del organizador del supergrupo, Nick Fury. Un ejemplo solo basta para explicar la calidad del film: la actuación de Mark Ruffalo como el suave, tranquilísimo Dr. Banner que supera incluso a un actor del nivel de Edward Norton con su último gran «Hulk», sin hablar del siempre eficaz Robert Downey Jr (cuyo Tony Stark que le dice «soy un admirador de su trabajo en física nuclear, y me encanta cuando se convierte en un monstruo verde que rompe todo») o la implacable Viuda Negra que encarna Scarlett Johansson especializada en hacerle creer a los villanos que la están torturando a ella cuando lo que hace es sacarles información engañosamente (una de las mejores escenas no es de acción, sino una intensa y dramática charla entre ella y el malvado Tom Hiddleston como Loki, por ejemplo). Por supuesto que detrás de todo esto están Marvel y Stan Lee (que como siempre hace un divertido cameo aplaudido por el público), pero sobre todo aparece por todos lados el talento del guionista de una obra maestra como «Toy Story», Joss Whedon, que como escritor y director logró combinar todos estos personajes famosos y darle el lugar adecuado a cada uno, no solo para que nadie se queje -todos los superhéroes y personajes secundarios tienen varios grandes momentos), sino también para que esto no sea uno de esos divertidos pero menores encuentros de monstruos de la Universal tipo «Frankenstein meets the Wolfman»,sino una historia en sí misma que potencia las características de cada uno de estos superhéroes ya no solo del comic sino a esta altura también del cine moderno.
Igual que con Banner, no sabemos si el secreto de Whedon será «el yoga, el jazz suave o la marihuana», pero lo cierto es que logró un gran film con humor, emoción, maravillas visuales y creaciones fantásticas inéditas, además de un notable mensaje antifascista que es la esencia de esta película imperdible.