Sonrisas de la joven tercera edad.
Love Punch reúne a dos encantadores y carismáticos actores, Pierce Brosnan y Emma Thompson, en una comedia sobre las relaciones de pareja en una tercera edad que accede a su retiro tras una vida de relativos lujos, sin haber desarrollado trabajos físicos y que comienza a proyectar sus sueños una vez finalizada su vida laboral formal.
Kate y Richard son una pareja separada hace años con dos hijos. Richard es presidente de una empresa que acaba de ser adquirida por un grupo empresario europeo para desguazarla, destruyendo así las pensiones de todos los empleados que invirtieron en las acciones de la compañía. Para protestar por la injusticia e investigar cómo recuperar los sueños perdidos, la ex pareja viaja a la sede del grupo empresario en París para tener una entrevista no pactada con su presidente, un joven ambicioso que está a punto de casarse con la hermosa Manon, una jovencita que no está segura de sus sentimientos hacia el inescrupuloso empresario. En la ciudad de la luz la pareja comienza un delicado juego de seducción en la convivencia y la complicidad de tantos años a partir de los buenos y malos momentos compartidos.
A contrapelo de la supremacía de la corporación norteamericana y del sueño americano, la historia mira hacia Europa y sus castillos, sus servicios sociales y sus empresas, que se aprovechan de las falencias de un sistema político y económico al servicio de los inescrupulosos accionistas que buscan enriquecerse a costa de las fisuras y las leyes de un sistema perverso. En este sentido también se ponen de manifiesto las diferencias entre los modos de habitar, de convivir y de amar en Estados Unidos y Francia y Europa en general; en lugar del encierro de la vida privada en las afueras de las ciudades de los estadounidenses la cinta ofrece la vida pública y bulliciosa de las capitales europeas.
La película pasa sin ambages de la comedia al trasfondo social convirtiéndose rápidamente en una ágil sátira absurda de las comedias de enredos. Los gags se suceden uno tras otro con maestría para proponer una risa inocente pero comprometida. Con diálogos precisos, una destacada labor de dirección y excelentes actuaciones, Love Punch es una rareza del género que sin proponer carcajadas apunta a mirar los sueños de juventud con una sonrisa para invitar a vivirlos sin importar la edad.
Lo que ocurre una vez que la cotidianeidad, la rutina y la necesidad de cambio destruyen una pareja es la posibilidad de reconstruirse, de reencontrarse, de seducir desde la complicidad. Ese es el “golpe de amor” que Love Punch formula como técnica de atracción para encender la llama del amor que una vez fue pasión y cautivar así al espectador.